Uno de los problemas más frecuentes que el cerrajero profesional soluciona a diario, es cuando un cliente sale de su casa y ha dejado la llave puesta en la cerradura en el interior de su hogar, y no tiene idea de cómo volver a entrar a su vivienda.
Esta es una situación que puede crear angustia, desesperación y enojo, así que la mayoría de las personas pueden hacer uso de la violencia para abrir la puerta, como intentar forzarla, golpearla o acceder a la casa a través de otras entradas.
Sin embargo, cuando la puerta se ha cerrado de esta forma, por lo general, se supone que no ha sido pasado el seguro, así que existe la posibilidad de poder abrir puerta llave dentro, empleando alguna de las técnicas que se explicarán más adelante… Y si el resultado no es el esperado, siempre tendrá la opción de contratar los servicios de un cerrajero profesional.
Método 1. Utilizar una botella de plástico
Utilizar una botella de plástico es quizás el método más reconocido en todo el mundo para abrir una puerta con la llave dentro, es muy sencillo de realizar, no requiere el uso de herramientas complejas y encontrar una botella de plástico que puedas desechar, es algo fácil de lograr.
El objetivo de contar con una botella de plástico, es que pueda realizar los cortes necesarios para obtener una hoja de plástico de su cuerpo. Esta hoja debe ser muy lisa, para que pueda cumplir con el objetivo.
Quizás en este momento, algunos piensen dónde podrán conseguir una tijera o un cúter para cortar la botella de plástico, pero debe considerar que cuenta con vecinos y amigos, por lo que podrá conseguir éste elemento con facilidad.
La razón por la cual se recomienda el plástico de una botella, es que éste es muy delgado para poder pasar entre el marco y la puerta, además de resistente, para poder mover el resbalón de la cerradura.
El proceso es muy sencillo, solo debe introducir la hoja de plástico entre el marco y la puerta, hasta que sienta que los haya atravesado por completo. Luego, deslice la pieza de plástico hasta el cierre. El resbalón tiene una forma de cuña, por ello se recomienda que incline un poco la hoja de plástico y realice un movimiento de sierra, así será más fácil de mover.
Si es posible, bañe el plástico en agua y jabón, o quizás con un producto que sea lubricante, de esta manera será más fácil deslizar la hoja de plástico a través del espacio entre el marco y la puerta.
Es importante señalar, que este método funciona cuando no ha sido girada la llave, en caso de haberlo hecho, no va a lograr abrir la puerta de esta manera.
Otra variación de éste método, es que en lugar de utilizar una botella de plástico, puede coger una radiografía, cuyo plástico es similar al de la botella, pero existe el riesgo de que se dañen los bordes de la radiografía, en cambio, la botella es un elemento desechable, por lo que si sufre algún daño, no sería relevante para el usuario.
Método 2. Con el uso de una tarjeta
Otro método que puede probar para abrir puerta llave dentro, es el de la tarjeta plástica, puede ser una de crédito, de débito o similares. En la actualidad se puede decir que todos contamos con al menos una tarjeta de este tipo.
Los expertos en el tema, recomiendan esta técnica para puertas con cierre de pomo simple y con pestillo inclinado o el de muelle. Si su cerradura no presenta estas cualidades, el método no será efectivo.
Para la aplicación de este método, lo primero es introducir la tarjeta en la ranura que existe entre la puerta y el marco. Luego debe deslizar la tarjeta hacia abajo, hasta llegar al pestillo o resbalón.
En ese punto, incline un poco la tarjeta, y luego comience a mover la tarjeta en dirección opuesta, con la intención de que se deslice por debajo del borde inclinado del pestillo y se pueda introducir lo suficiente en ese borde del pestillo.
Cuando logre llegar a éste punto, apoye el cuerpo en la puerta y comience a mover la tarjeta hacia adelante y hacia atrás, de esta manera podrá lograr que deslice el pestillo, y así liberar la puerta.
